Hoy no hay gran cosa nueva que contar, todo lo que hemos hecho ya lo hicimos hace años. El hotel está bastante bien salvo el cuarto de baño, que da risa. Parece hecho para asiáticos enanos. La ducha me llega a la altura del pecho y el cuarto de baño en total no supera los dos metros cuadrados. Si te estás lavando los dientes, olvídate de que haya nadie más allí. Es ridículo. Por lo demás, una cama enorme y cómoda, un servicio excelente y un supermercado gourmet justo enfrente que nos hace plantearnos cenar en la habitación casi todas las noches.
Esta mañana decidimos desayunar con productos del supermercado. El stand de quesos australianos es espectacular. El hotel tiene una cocina abajo en la que podemos tostar pan. No estamos muy lejos del Opera House, unos 40 minutos andando, así que decidimos ir con la calma. Bueno, una calma autoinducida, porque hubo un momento en que el Google Maps nos iba a meter por una autovía con aceras de 20 centímetros. Siempre confía en tu instinto antes que el ordenador, por favor.
Para ir al Opera House hay que pasar por los Royal Botanic Gardens, uno de los jardines más bonitos que conocemos. Es muy grande, con especies animales y vegetales que no hemos visto en ningún otro sitio. Son típicos de Sydney unos bichos de pico largo que son muy comunes, casi tanto como las palomas. Hay incluso una sección de helechos de la época de los dinosaurios. Al final del todo llegas al lado del mar y ya sabemos que es el camino para llegar al Opera House y el Harbour Bridge.
Hemos querido hacer una foto que ya hicimos en 2006 y 2016. Tras varios intentos y gracias a la paciencia de una pareja local hemos conseguido algo bastante parecido al original. Había una competición de baile infantil dentro del Opera House, imaginaros qué chulo sería para los chavales. Me he sacado una foto escribiendo algo para el blog. Es mentira, completamente postureo. Estaba escribiendo "acelgas, berzas, calabacines y el coño de la Bernarda" o algo así. El que solo vea la foto pensará, ay, Javi, mira qué intelectual. Pues no.
Tras un buen rato admirando al Opera House desde todos los ángulos hemos tirado para el mercado de The Rocks, que solo está los domingos. Se ha vuelto bastante más sofisticado, con mucha artesanía local y mamarrachadas en plan "pero cuántos objetos de mierda tienes que vender para que este puestecillo te salga rentable". Ya no venden llaveros con los cojones del canguro como antiguamente, pero sí que hay un mercado de comida muy diverso. Había un puesto de paella regentado por españoles. Hemos estado hablando con ellos. El conejo y el caracol están prohibidos en la paella, y le echan chorizo a propósito porque es lo que quieren los australianos. Donde fueres, haz lo que vieres.
Una cosa muy chula y muy rápida que hacer en Sydney es coger un ferry que va por debajo del Harbour Bridge hasta el Luna Park, que es un parque de atraccines un poco chusco. Es un ferry público, cuesta 17 dólares australianos (11 EUR) el trayecto de ida y vuelta, y tienes unas vistas imbatibles del Opera House. Muy recomendado, aunque solo sean unos minutos. La vista en el lado del Luna Park también merece mucho la pena.
El tiempo nos está respetando de momento. Ya llegaremos a Queenstown y sus seis grados bajo cero. Mañana queremos ir a algunos museos y mercadillos distintos a The Rocks. Tendremos un día más en Sydney y no sé muy bien qué haremos, pero es una gran ciudad, seguro que hay mil cosas que hacer.
Tendrán ustedes más información mañana, que nos vamos a cenar...
PD: Esta buena gente vende cecina de cocodrilo, emú y canguro. Y la venden en el mismo paquete, eso sí, en bolsitas por separado. Carne seca de cocodrilo, amigos, el snack definitivo. Conquisten a sus amigos y consigan que nunca vuelvan a su casa.
PD2: El cuanto a número de visualizaciones, el interés por este blog ha caído en picado. Esto hace 10 años me molestaría, ahora no solo me la sopla, encima pienso que es una ventaja para que podamos decir lo que realmente queremos. Libertad creativaaaarrr.
Traeros esos snack!!! Tienen que estar buenísimos!! Sabrán a pollo....como todo lo que no se sabe definir.
ResponderEliminarNo sé, no lo veo. Seguramente sepan más a polla que a pollo. Simple intuición, no tengo referencias al respecto. Heh.
EliminarOs verá menos gente, pero estáis de mejor ver que hace 10 años!!!!
ResponderEliminarGracias por poner esa referencia a la temperatura!
Yo quiero un boleto de loteria!
Jejeje
Un boleto de lotería australiana? No creo que ni la podamos cobrar. Belén está de mejor ver cada vez. Lo mío es una historia mucho más triste...
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