lunes, 10 de agosto de 2020

Guía de Sevilla de Aventura Global (y 3): Tapas y restaurantes

 


Todo lo bueno se acaba... y está guía se acabó. Eso sí, nos vamos en todo lo alto, con una guía de bares de tapas y restaurantes de Sevilla. Los bares de tapas son mis favoritos, pero he pedido a mis amigos que me den más nombres. Muchos de estos bares no los conozco, pero mis amigos presumen de sevillanía y pongo la mano en el fuego con sus recomendaciones. Respecto a los restaurantes, he intentado poner uno de precio muy alto, para ocasiones especiales, tres de precio medio con gran calidad, y uno de precio bajo, de batalla, porque hasta algo tan universal como la pizza puede llegar a ser muy sevillana.

Así que vamos allá. Lo he dividido en grupos de cinco por dos motivos: 1) porque menos es muy poco y más es hacerse muy pesado y 2) porque el cinco tiene muy mala rima, es una palabra a evitar en los finales de frase aquí en Sevilla. Algunos no dirán la rima (por el culo te la jinco) por decoro, educación o respeto. Pero lo piensan. Lo piensan. Y sonríen maliciosamente.

BARES DE TAPAS


 


1) Eslava (Eslava, 3).- 


Es mi bar de tapas favorito de Sevilla, y eso lo convierte en mi bar de tapas favorito del mundo. No es muy grande, así que no recomiendo ir en horas puntas. Hay tres tapas que hay que pedir sí o sí. Las costillitas con miel, ininterrumpidamente en la carta desde hace muchísimos años, Un Cigarro para Becquer, tapa de pescado con presentación como si fuese un puro, y la yema de huevo con bizcocho y salsa de boletus, mi favorita, algo espectacular. No es muy caro, se come excelentemente, y para mí no tiene rival. 


2) Abacería del Postigo (Tomas de Ibarra, 4).-
 

Sencillo, buenísimo y con un trato de 10 en pleno Arenal de Sevilla. La chacina y los quesos son de primera calidad (recomiendo el queso payoyo, uno de mis favoritos, no lo he comido mejor que aquí en ningún sitio) y las tapas y raciones son un poco más elaboradas pero muy sabrosas. Recomiendo el pisto con huevo de codorniz. 



3) Casa Ricardo (antiguamente Casa Ovidio, Calle Hernán Cortes, 2).- 

 

Aquí hay una tapa estrella y toda Sevilla va a allí a comer lo mismo: sus insuperables croquetas. Crujientes por fuera, líquidas por dentro, dan ganas de comerse una docena. Es un bar muy castizo, con música y fotos de Semana de Santa. El bar abrió en el Siglo XIX y la receta de las croquetas ha pasado de generación en generación. No lo intenten en casa. No van a mejorarla. Es mejor ir para allá y disfrutar del espectáculo en tu paladar.  

4) El Rinconcillo (Gerona, 40).- 

 

Presume de ser el bar de tapas más antiguo de Sevilla, abrió sus puertas por primera vez en 1670. La arquitectura del bar está igual desde 1897 y el bar en sí es un auténtico museo. Todo esto no valdría de nada sin las tapas no estuvieran buenas, claro, y lo están. Recomendamos sus míticas pavías de bacalao y sus espectaculares espinacas con garbanzos. Merece la pena darse una vuelta por el bar, ver las fotos del local y disfrutar del ambiente. Hay que ir.

5) Las Columnas (Bodega Santa Cruz, Rodrigo Caro 1 junto a Mateos Gago).-
 

 

Recomendado fundamentalmente por dos motivos. Uno, su montaíto de pringá es algo legendario: no es para vegetarianos, la mezcla de la pringá incluye de carne de cerdo, morcilla, chorizo y tocino, con sal y pimentón, con un bollito tostado en el grill. Segundo, los camareros tienen mucho arte y en un buen día puedes salir de allí muerto de risa con los chistes, los vaciles y las tonterías de estos fenómenos. Buena comida y buen rollo.

Esta es mi lista, que he compartido en el grupo de whatsapp de mis amigos que conozco desde que tenía 5 años. Por supuesto, rápidamente me han ofrecido alternativas para hacer otro Top 5 (ay, esa rima) con bares distintos. Así que allá va.

BARES DE TAPAS, SEGUNDA PARTE: MIS AMIGOS


1) La Fresquita (Mateos Gago, 29).- 

 

Casi al lado de Las Columnas está La Fresquita, mítico sitio cofrade con tapas tradicionales: espinacas con garbanzos, menudo, carne con tomate y, cien, una de las mejores ensaladillas de la ciudad. Digo "dicen" porque a mí me repugna la ensaladilla, pero parece que gusta. Parada obligatoria cerca de La Giralda: Mateos Gago está lleno de buenos bares de tapas.

2) La Reserva de Joaquín Márquez (Virgen de las Montañas, 14).-
 

 

Está en el barrio de Los Remedios. No he estado, pero mis amigos me pidan que lo incluya por su magnífico salmorejo y su tataki de presa, algo distinto e innovador. Tiene capacidad para 150 personas y funciona como restaurante y bar de tapas.

3) Casa Morales (García de Vinuesa, 11).- 


 

Está en pleno centro y el local data de 1850, famoso por sus enormes tinajas de barro. Es, quizás, uno de los bares con más solera de todo Sevilla, más auténtico, los camareros te toman la comanda apuntando con tiza, a la antigua usanza. Tienen dos docenas de tipos de montaditos, quizás más, y es típico el menudo con garbanzos. Rancio, en el buen sentido, y apetitoso.

4) Bodeguita Antonio Romero (Antonia Diaz, 19).-
 


 

Está en el Arenal, cerca de la Plaza de la Maestranza. Hace tiempo que no voy, pero eso da igual porque estará tal y como lo recuerdo: con un cuadro imponente de Jesús del Gran Poder y con las tapas de toda la vida. Cocina tradicional sevillana, garantizado, y todo está buenísimo: montaítos, solomillo al whiskey, pisto, tortilla de patatas... lo más recuerdo es que hacían unas albóndigas excelentes. Camareros veteranos, con oficio, y tapas auténticas.

5) El Tremendo (San Felipe, 13).-  

 

Bueno, al Tremendo hay que ir porque no hay nada más sevillanos. No es que haya mucha variedad: cerveza fresquita, excelentemente tirada, y cacahuetes, las clásicas 'arveyanas2 sevillanas. Igual también tienen almendras, papas fritas y altramuces, pero no esperes mucho más. Muy barato, muy animado, muy divertido y con mucha tradición: si le dices a un sevillano "estuve en El Tremendo", se ganará tu respeto. Forever.

RESTAURANTES (ordenados por precio, empezando por el más caro)

1) Ispal Restaurante (Plaza San Sebastían, 1).- 


 

Ideal para una ocasión especial. Presumen de ser 100% sevillanos y de utilizar productos de Kilómetro Cero. Pertenece al Grupo La Raza, de gran tradición en la ciudad. Puedes optar por el menú degustación, pero si hay que elegir, recomendamos los huevos fritos con camarones y pimientos asados y el cochinillo con puré de zanahorias, vainilla y ajo asado. Ah, sí, es como cenar en un palacio. El local es inmejorable, impresionante, único.

2) El Gallinero de Sandra (Esperanza Elena Caro, 2).-
 

 

Está un poco escondido, en un pasaje cerca de la Alameda de Hércules, pero el Gallinero de Sandra merece mucho la pena. La dueña, Sandra, es encantadora y te explicará lo que necesites saber de todos los platos de la carta. El menú cambia cada cierto tiempo menos un plato: los huevos camperos estrellados, una auténtica delicia que hay que probar sí o sí. Postres sorprendentes, carnes y pescados en su punto... Una maravilla de sitio.

3) Antigua Abacería de San Lorenzo (Teodosio, 53).-  


 

Tradicional, un valor seguro justo al lado del Eslava. Ramón, el dueño, vente su local de forma muy imaginativa, con catas temáticas y actividades muy bien pensadas. Una de las opciones de la carta es "lo que diga Ramón". Tú le explicas lo que no te gusta y él, por 20 EUR por persona, te saca lo que le da la gana, todo buenísimo. Es díficil encontrar mesa e imposible no comer bien: revueltos, pistos, caldereta, carne, quesos, mejillones... Imprescindible.

4) Zarandaja (Avenida de la Buhaira, 14).- 

 

Cocina de fusión sin perder la esencia sevillana. Recomiendo especialmente las croquetas de jamon: no son las de Casa Ricardo pero casi. También las piruletas de langostinos con queso cremoso, gran invento. Buenas ensaladas, solomillo al Pedro Ximénez, canelones... Es muy difícil elegir. Camareros muy amables, local amplio, muchas mesas fuera y lo mejor, un precio muy competitivo. Puedes comer mejor que bien con vino y postre (oh, los postres) por menos de 25 EUR.

5) Sloppy Joe's (varias localizaciones).- 

 

Es probablemente la mejor pizza de la ciudad. El tipo podría haberse hecho de oro si hubiese montado locales en Madrid o Barcelona, pero pasa tres cojones de hacerlo porque en Sevilla ya gana mucha pasta. Imprescindible su pizza número tres, que debería ser patrimonio de la UNESCO: carne, chorico, champiñones, jamón york. Hacen buenas hamburguesas y ensaladas más que decentes, pero es una pizzería, y las pizzas, más de 30 variedades, son brutales. Todo a un precio irrisorio.

Esto es todo, que no es poco. Esperamos vuestros comentarios, sugerencias, quejas y agradecimientos debajo de estas líneas. Retomaremos la programación habitual del blog cuando pongamos los pies en Menorca. ¡Hasta pronto!


10 comentarios:

  1. En Sevilla me gusta mucho un bar de tapas que hay por detras del Salvador, pasando la plaza de Alfalfa, se llama La Bodega de la Alfalfa. Hace mucho que no voy pero tengo un buen recuerdo de todo lo que probé alli

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sevilla es inacabable cuando se trata de bares. La Bodega de La Alfalfa la conozco bien, salía por esa zona durante años y cenaba allí a menudo. Gran sitio!

      Eliminar
  2. Respuestas
    1. Las tapas no dan para el Top 10. Como sitio para tomar un café o una cerveza con un amigo, es un 10. Mi sitio favorito.

      Eliminar
  3. En el Zarandaja no dejen de pedir la ensaladilla de pulpo... esta brutal.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mi plato fetiche allí son las croquetas. Pero todo está buenísimo. Y a un precio supercompetitivo.

      Eliminar
  4. Viviría en el Eslava y el Ovidio. Geniales elecciones Javi

    ResponderEliminar
  5. Ese salmorejo que se come con tenedor... ¡qué delicia! He ido a Casa Joaquín Márquez en C/Felipe II, no sabía que también estaba en Los Remedios (parece que es del hijo).
    Por cierto, ¿existe alguna forma humana de conseguir coger sitio en Eslava? A mi edad aún no lo he conseguido...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes que ir temprano, Migue. Estar allí 15 mins antes de que abran, rollo 12:45 o así

      Eliminar